El fin semana comenzó con la apertura del Año Jubilar con motivo de los 500 años de presencia de las Hermanas de la Orden de los Mínimos en Jerez y terminó con la celebración de la Pascua del Enfermo en el Santuario San Juan Grande.
La Diócesis abría el mes de mayo, mirando a una realidad eclesial presente en Jerez que estaba de celebración. Hablamos de las Hermanas de la Orden de los Mínimos, las cuales este sábado abrían un Año Jubilar con motivo de cumplir 500 años de presencia en Jerez.
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Otro de los momentos importantes del fin de semana nos llevaba hasta el Hospital de la Orden de San Juan de Dios. En concreto, hasta el Santuario de San Juan Grande, donde Monseñor José Rico Pavés, Obispo de Asidonia-Jerez, presidía la Eucaristía con motivo de la Pascua del Enfermo.
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En la homilía de la apertura del Año Jubilar, el Sr. Obispo de Asidonia-Jerez recordaba el gran acontecimiento que supone para nuestra Diócesis este Año Jubilar, pero también el que se ha abierto en la Basílica del Carmen. Asimismo, destacó la labor de la Vida Consagrada, pilar fundamental para sostener a la Iglesia. Igualmente, subrayó la vida de San Francisco de Paula, fundador de la Orden que cumple 500 años de labor evangelizadora en nuestra Diócesis.
Por otro lado, siguiendo las lecturas que la liturgia nos traía en este día, ha recordado en primer lugar que para llegar al Señor hay que hacerse pequeño, es decir, saber que sin Él no somos nada. En segundo lugar, debemos conocer el camino que Cristo tiene para nosotros, ya que este será el que nos llene de felicidad. En tercer lugar, ha recordado la peregrinación que comienza con este Año de Gracia, un camino para sanar nuestras heridas y alcanzar nuestra meta que es la vida eterna.
En otro orden de ideas, ha destacado que sabremos que vamos por el camino correcto, si el amor de Dios aparece en nuestra vida cotidiana con nuestros hermanos. Asimismo, ha recordado la importancia de buscar en el Señor lo que Él solo nos puede dar que es el amor pleno que puede darnos alegría incluso en momentos difíciles.
Por último, ha mencionado a nuestra madre María, ella que es puerta para llegar hasta su Hijo. Asimismo, ejemplo de voluntad y oración para así llenarnos del amor de Dios.
